“Vivir la Comunión en la caridad significa no buscar el propio interés, sino ser capaces de compartir las alegrías y los sufrimientos de los hermanos, ser capaces de llevar los unos las cargas de los otros” (Papa Francisco, Audiencia general semanal en la Plaza de San Pedro, 8 de octubre de 2013).
La Hermandad, coincidiendo con el arranque de las celebraciones del II Centenario, quiere hacer llegar este mensaje a todos sus hermanos y simpatizantes. Es momento de compartir, amar, consolar, sacrificarse, crear igualdad y derribar muros. Sólo así conseguiremos liberarnos de nuestra miseria, entendida como la pobreza sin confianza, sin solidaridad, sin esperanza.
“Los cristianos estamos llamados a mirar las miserias de los hermanos, a tocarlas, a hacernos cargo de ellas y a realizar obras concretas a fin de aliviarlas” (Extracto del Mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma 2014, Vaticano 26 de octubre de 2013).
Invitaros a la Pobreza personal y comunitaria, que animada por el Espíritu Santo, nos ayudará a vivir como hijos de Dios y hermanos de Cristo. Y así juntos lograr una Iglesia constituida por los que tienen conciencia de ser pobres.
Recordad las palabras de San Pablo: “Se hizo pobre para enriquecernos con su pobreza” (San Pablo, 2 Cor 8,9).
La Finalidad de Jesús al hacerse pobre, no es la pobreza en sí misma, sino su forma de amarnos que nos da verdadera libertad, verdadera salvación y verdadera felicidad.